Nuevo tratamiento por catéter y sin cirugía para realizar la reparación de la válvula mitral con el sistema Neochord

¿Cómo se realiza un procedimiento TAVI?

La válvula mitral es una de las cuatro válvulas que tiene el corazón. Su función es abrirse para permitir el paso de la sangre desde la aurícula izquierda al ventrículo izquierdo, y cerrarse cuando el ventrículo izquierdo se contrae para bombear la sangre por la aorta hacia el todo el organismo.

Ese movimiento de abertura y cierre debe ser perfecto y realizarse de forma sincronizada con el ciclo cardiaco, puesto que el corazón de llena y se vacía entre 60 y 100 veces por minuto, millones de veces durante la vida de una persona.

Figura 1

La válvula mitral es una estructura compleja (Figura 1) De forma sencilla, podría describirse la válvula mitral como dos grandes paracaídas, uno posterior y otro anterior. Cuando el corazón late, las cuerdas del paracaídas se tensan y los velos (la parte blanca del paracaídas) se mueven coordinadamente hasta que ambos se tocan y cierran el orificio mitral, no dejando escapar la sangre hacía atrás.

Cuando la válvula mitral no cierra correctamente, una parte de la sangre del ventrículo izquierdo no se expulsa hacia adelante, sino que – de forma retrógrada – se dirige hacia la aurícula izquierda y los pulmones, para volver de nuevo al ventrículo izquierdo determinando una sobrecarga de volumen en cada latido. En esos casos hablamos de INSUFICIENCIA VALVULAR MITRAL o REGURGITACIÓN VALVULAR MITRAL.

Si el volumen de sangre que se escapa de forma retrógrada es importante (INSUFICIENCIA MITRAL SEVERA), el paciente empieza a experimentar dificultad para respirar al caminar (especialmente en subidas), cansancio, taquicardia y arritmias e incluso hinchazón y edemas de los pies.

La insuficiencia mitral severa puede aparecer en pacientes jóvenes y también en pacientes de edad avanzada, y es más frecuente a partir de los 70 años de edad.

En ambos casos, la causa es una alteración degenerativa del tejido que forma la válvula mitral, que se manifiesta como un aumento del tamaño de las valvas, una elongación o ruptura de una o más cuerdas tendinosas, y una dilatación o ensanchamiento del anillo mitral. El resultado es lo que llamamos PROLAPSO DE LA VÁLVULA MITRAL.

El prolapso de la válvula mitral simplemente indica que existe un exceso de movimiento de alguno de los dos velos (o de ambos) de la válvula mitral, de forma que no existe un cierre o coaptación adecuada de esa válvula, y una parte de la sangre que expulsa el ventrículo izquierdo al latir, se escapa de forma retrógrada entre ellas.

Es muy importante poder controlar el problema de forma precoz, antes de que el corazón se dilate y pierda fuerza de contracción, o de que aparezcan arritmias u otras complicaciones.

Hasta hace pocos años, la única solución del problema era una operación cardiaca.

Tenemos una gran experiencia en reparación de la válvula mitral (más de 800 casos en los últimos 10 años, con excelentes resultados). Con una operación hemos reparado casi el 100% de los casos, con un riesgo muy bajo (menor del 1%) y mediante técnicas de cirugía mínimamente invasiva (pequeña incisión de 7-8 cm en el costado derecho del tórax) que permiten una rápida recuperación.

La reparación de la válvula mitral, evitando tener que cambiarla por una prótesis artificial, tiene ventajas incuestionables:

  • Mantenemos la propia válvula del paciente funcionando de forma correcta
  • Evitamos tener que implantar una prótesis artificial y por tanto, evitamos tener que tomar anticoagulantes (Sintrom ) de por vida.
  • Se preserva mejor la arquitectura del corazón
  • Es más resistente a la infección
  • El corazón se recupera más rápidamente
  • El paciente se recupera más rápidamente

Ahora, con el dispositivo NEOCHORD podemos reparar la válvula mitral a través de catéter y sin necesidad de cirugía.

¿Cómo reparamos una válvula mitral que no cierra correctamente, sin cirugía?

El sistema NeoChord DS1000 es una opción MUY POCO AGRESIVA para poder reparar la válvula mitral que no cierra correctamente, implantando cuerdas artificiales. Se realiza una mini-incisión (4-5 cm) en la parte lateral del pecho y a través de la punta del corazón, y sin necesidad de circulación extracorpórea y mientras el corazón sigue latiendo normalmente, se introduce un dispositivo que navega hasta la válvula mitral. Utilizando la guía por ecocardiograma 2D y 3D, el sistema llega hasta el segmento afectado (prolapso) de la válvula mitral e implanta las nuevas cuerdas restaurando el correcto cierre de la válvula.

¿Por qué son importantes las técnicas mínimamente invasivas en la reparación mitral?

Con las técnicas de cirugía mínimamente invasivas, las incisiones se limitan a unos 4-8 cm en la parte lateral derecha del tórax, y no es necesario abrir el esternón. Con el sistema Neochord tampoco es necesario utilizar la circulación extracorpórea y se realiza con el corazón latiendo.

Las ventajas de esta forma de abordaje son una menor agresión de los tejidos, menor sangrado, mucho menor dolor postoperatorio y una más rápida recuperación del paciente.

La gran mayoría de esos pacientes tienen una estancia hospitalaria de 5-6 días y una recuperación muy rápida y con escasas molestias, pudiendo volver a una vida normal, plena y activa, y sin tratamiento anticoagulante.